Entrevista al escritor Andrés Montero. Por qué leer cuentos en el siglo XXI.
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En el marco de la 8va Feria del libro Renueva tu biblioteca: la palabra como puente, conversamos con el autor y narrador chileno Andrés Montero.

Durante el mes de noviembre se desarrolló en el Centro de Arte Molino Machmar
(CAMM) de Puerto Varas la 8va Feria del libro Renueva tu biblioteca: la palabra como
puente, a la cual asistió la Editorial de la Universidad de Los Lagos.

En dicha feria se desarrollaron diferentes presentaciones de libros, conversatorios, talleres.


Asistieron las autoras Paloma Valdivia, se presentó un libro sobre la vida del fotógrafo chileno Sergio Larraín, estuvo el poeta Yanko Gónzalez, y el escritor chileno Andrés Montero. Este último presentó su libro El año en que hablábamos con el mar, editado por La Pollera Ediciones.

El bibliotecólogo de la Dirección de Bibliotecas, Julián Bustamante, le realizó una entrevista a Andrés Montero donde se trataron las temáticas de la lectura por ocio; los diferentes formatos de lectura y las diferentes distracciones que hoy nos “complejizan” darnos un tiempo para la lectura.

Le preguntamos a Andrés Montero: A veces nos distraemos fácilmente con el celular,
redes sociales, etc. ¿Cómo haces con esos factores para tu proceso de escritura y/o
lectura?

Sí, el celular y las redes sociales nos están mandando la concentración y la capacidad de atención realmente es una pandemia. Lo que yo hago es que si voy a leer, necesito dejar el celular muy lejos, que no lo pueda tomar, porque realmente es como una adicción, de cada 10 minutos tomar el celular, porque sí, a veces por ver la hora, pero uno después se queda viendo algo, entonces yo creo que no puede estar cerca, lamentablemente.


Bueno, hay gente que lo lleva mejor, en mi caso al menos tengo que dejarlo lejos. Y también lo que he hecho es como eliminarme de algunas redes sociales y otras como Instagram, que no la puedo eliminar porque trabajo mucho por ahí, la voy desactivando, entonces estoy dos semanas desactivado y realmente ayuda mucho a concentrarme de nuevo.


Cuando voy a escribir trato de ir a lugares donde no tenga internet, o sea, por ejemplo, una vez al año trato de ir a una cabaña en la cordillera, donde no hay señal, donde no hay nada, y ahí a lo mejor funciona mucho mejor. Pero igual, si voy a una biblioteca o algo, no me conecto al wifi, sino que me pongo audífono y a escribir. Me resulta mejor escribir así que en casa, por ejemplo. Siempre lugares donde sea más difícil la conexión. Si antes era un privilegio estar conectado, hoy día es el privilegio de estar desconectado.

La entrevista completa la puedes escuchar en el siguiente enlace de La última estantería en
Spotify:
https://open.spotify.com/episode/3XPln1TKGKahWjZ6eJaJeh?si=912e01a48c8e45a7-

Por dirección de Bibliotecas.

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